
La intervención de Nomi en este proyecto se desarrolló en colaboración con el equipo de arquitectura y construcción, centrando los esfuerzos en aportar soluciones que potencien la amplitud de los espacios.
Toda la carpintería interior fue diseñada y fabricada a medida, incluyendo los armarios empotrados de líneas limpias en las zonas de paso y de descanso. Las puertas, con altura completa hasta el techo, contribuyen a reforzar la verticalidad y continuidad visual de los paramentos, manteniendo un lenguaje sobrio y uniforme en toda la vivienda. Este planteamiento permitió integrar los distintos elementos sin interferir con la estética minimalista del conjunto.
El mobiliario de baño también fue fabricado a medida, con soluciones que combinan funcionalidad y elegancia: encimeras continuas, lavabos integrados y acabados neutros acorde a los revestimientos seleccionados. La precisión en los encuentros y la atención al detalle fueron clave para lograr un acabado depurado y coherente con el diseño general del proyecto.
Este trabajo pone de relieve la capacidad de Nomi para adaptarse a proyectos con una fuerte identidad arquitectónica, ofreciendo soluciones técnicas y estéticas.